Vuélveme a conocer, 
volvamos a coquetear, 
regresemos a las tonterías ocurrentes y las pláticas sin sentido de madrugada,
vuelve a decirme que te gusto,
que regrese esa ilusión de hablar todos los días,
seamos tontos de nuevo, 
que vuelvan los suspiros y las caras ruborizadas, 
volvamos al inicio cuando aún no sabía que te terminaría amando...